Sin retorno

Sin retorno...

  

 

  

En los lindes del misterio insondable se vislumbra,

diminuto rayo de luz

en el cosmos nacido,

destino y sentimiento confundidos en un haz,

vida... alas...

y  poesía latiendo al compás.

 

Aurora universal,

feto en gestación divina,

se mueve, crece y siente el calor de la vida;

un esbozo apenas sus alas...

comienza el amor,

se alimenta de sueños...

y recuerdos... y poesía...

 

Nacen dos plumas enormes

 y se mueven al son,

vuelan... y discurren

 ansiosas sobre las olas y la arena,

ríen... lloran...

escarbando un horizonte de esperanzas,

y aman...

ciegas...

 libres...

¡Dios, cómo aman!

 

Me vistieron blancas alas

una moche de un día de otoño,

y volamos juntas,

 escarbando destinos y mares remotos,

me enseñó dulzuras...

me marcó senderos...

viví!!

Y amé...

 ¡Dios, cómo amé!...

¡cómo!...aún lo amo.

 

Y sigue volando,

surcando rumbos, latiendo firme,

corazón indómito,

tu vuelo está signado,

Orión,

tu caza se hizo cóndor

y perforó las nubes de algodón,

destino de volar;

seguiste la ruta...

Cuando el destino es amor,

no hay retorno...

Sólo me resta

mirar arriba

y esperar...

  

Ninfa  Duarte